DEDOPLASTSKARO a 13 de mayo de 2023

 

 

Vaya noche nos ha hecho pasar la lluvia. No ha parado ni un momento. Además, había un perro por hay suelto que cada vez que pasaba alguien o un coche no paraba de ladrar.

Nos hemos levantado más tarde que nunca ya que casi eran las 9h, pero sólo oír la lluvia se nos quitaban las ganas de levantarnos. He bajado a por leche al garaje y me he dado cuenta que la garrafa de 10l de agua estaba un poco aplastada y faltaba la mitad del agua. Eso quiere decir que “vaya cisco” ya que se ha mojado todo y hay que vaciar el garaje para secarlo bien.

Hemos aprovechado un rato que ha dejado de llover y hemos ido hasta una explanada que hay al lado del cementerio para vaciar el garaje y secarlo bien. Menos mal que no ha llovido en ese rato. Cuando salíamos del parking donde hemos dormido Mertxe me dice que ha visto a un señor con txapela que bajaba calle abajo. Hemos comenzado la bajada y le hemos alcanzado. Nos hemos presentado y le he puesto en el traductor que como le llamaba a lo que llevaba en la cabeza. Me ha dicho que sombrero. Le he comentado de dónde éramos, pero no entendía nada. Quería regalarme la txapela, pero me he negado y le he dicho que allí la lleva mucha gente. Ya me diréis.


El me ha dicho que aquí la llevan algunos mayores pero que no tiene ningún significado. En un papel ha apuntado txapela y se ha ido. Antes nos hemos sacado una foto.

Luego hemos decidido que mientras esperamos al visado vamos a ir a ver un Monasterio que, aunque no nos fiamos la gente dice que es muy bonito ya que esta en un lado de una montaña como si estuviese colgado. Está en un pueblo a unos 70km de donde estamos, pero aquí no hay nada para ver y ni siquiera podemos salir a dar un paseo por la lluvia.

Hemos salido en dirección al Monasterio y puedo decir que la carretera es muy buena, aunque con muchas curvas, pero el asfalto está perfecto todo ello referido a las carreteras de Georgia. Hemos llegado al pueblo y enseguida hemos puesto el Maps para que no lleve al Monasterio. En menos de 15mn ya estábamos en las puertas. Nos ha costado el último tramo ya que entre el agua y que la carretera es de cemento había muchos tramos que patinaba. 




Tiene una entrada al complejo muy fea ya que es metálica y está toda oxidada, además hay una niebla que no se ve más allá de nuestras narices así que he vuelto al parking y les he preguntado a una parte que justo llegábamos ellos salían del recinto. Nos ha explicado que hay que bajar unos 100m y luego entrar en un camino a la derecha y enseguida se ven las escaleras para subir. Lo hemos hecho y enseguida estábamos subiendo las escaleras hacia el Monasterio. Se llama ST. Elia Monastery o también le llaman St. Elia Mountain. Está emplazado en un risco y fue totalmente reconstruido en el año 2006 aunque se sabe que está encima de los restos de una Iglesia del siglo VI.


Cuando hemos llegado arriba ha comenzado a llover así que la bajada de las escaleras de piedra será bastante difícil. Hemos abierto la primera puerta que da paso al Monasterio y hemos visto la Iglesia encima de la roca. Todavía quedaban unas cuantas escaleras para llegar a la Iglesia. 


Las hemos subido y por dentro es muy normalita, pero llama la atención que unos de las paredes esta justo en una parte de la roca. Hemos sacado unas fotos y al salir hemos visto que está el plato de la limosna encima de la mesa, ni siquiera un poco escondido. Nos hemos echado a reír porque el comentario de los dos ha sido el mismo, esto allí….


Hemos vuelto al parking y justo hemos llegado hemos podido sacar una foto ya que antes estaba todo tapado por la niebla. Las vistas son preciosas. Han llegado 3 coches y un minibús así que nos hemos ido rápido antes de que se llenase de gente. Hemos vuelto al pueblo y queríamos buscar el mercado. Íbamos mirando para todos los lados y de repente hemos visto una punta de lo que pensábamos era una Iglesia y así es. Es el Monasterio de San Jorge. Hemos aparcado justo enfrente ya que la calle es muy ancha. Hemos entrado y hemos visto un Monje que nos ha saludado con la mano diciéndonos hola.


Hemos entrado y nos hemos quedado alucinados, lo están repintando y se ve todo reciente. Llama la atención porque normalmente están ya muy gastadas las pinturas o como hay poca luz no se ven bien pero aquí relumbran. Cuando nos íbamos al salir nos ha hecho una señal el Monje y se ha acercado a preguntarnos de dónde éramos.



 Le hemos dicho que del País Vasco y se ha echado la mano al corazón. Nos ha dado la mano a los dos y por medio del móvil nos ha explicado que conoce mucho de allí y que ya sabe que tenemos muchas cosas en común. Nos ha dicho que esperaríamos un poco y al cabo de unos minutos ha vuelto con un cuadro pequeño de San Jorge que nos ha regalado. Le hemos pedido que se sacaría una foto con nosotros y enseguida nos ha cogido del hombro y nos hemos sacado la foto.


 Hemos salido en busca del Mercado y enseguida lo hemos encontrado. Está justo en el centro de una plaza que divide las dos carreteras de salida del pueblo. No hay muchos puestos, pero queríamos buscar algo de fruta ya que en el 90% de los sitios solo hay manzanas, fresas y plátanos. Hemos comprado unas vainas que pondremos hoy para comer ya que tenían buena pinta. Hemos ido a comprar el pan, pero no hemos encontrado algo que tuviese buena “pinta” así que hemos cogido uno que nunca lo habíamos comprado luego ya veremos como está.

Hemos salido del Mercado y he visto que tenía una M de un email. Es la Embajada que nos dicen que ya tenemos aprobado el visado pero que no podemos entrar hasta el día 17. ¿Qué hacemos aquí hasta el miércoles? Tendremos que mirar porque por aquí no hay nada interesante y la opción de hacer alguna ruta se cae por el tiempo así que durante la comida ya hablaremos para ver qué hacemos. ¿Porqué hasta el día 17? Todavía quedan reminiscencias del pasado ruso.

Hemos paseado un poco, pero nos hemos dado cuenta que no hay nada para ver. Hemos vuelto a la autocaravana y comeremos tranquilamente. Pensaremos que hacer.

Bueno, hasta mañana.

 

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