BATUMI a 7 de junio de 2023

 

 


Menuda nochecita que hemos pasado hoy. No ha dejado de llover en ningún momento además de un vendaval y un ruido increíble de la “marejada” que había en el mar. Al final hemos decidido venirnos a Batumi para pasar por donde Anvar para lavar la ropa que tenemos acumulada. No es que tengamos prisa, pero tampoco queremos que se haga mucha cantidad. Después de la “nochecita” hemos recogido todo hemos subido la moto al portamotos y nos hemos venido a Batumi, pero en vez de al parking de Euphoria hemos entrado en el de Marina Puerto que es más espacioso y esperemos que menos ruidoso. Tenemos la playa cerca y estamos más cerca del centro.

Nada más llegar a Batumi hemos puesto la dirección de la lavandería. Al llegar le hemos escrito ya que eran las 10h y no estaba abierto. Tenía que hacer algún papeleo y nos ha dicho que hasta las 11h no podía abrir. 


Hemos tenido suerte y hemos aparcado muy cerca de donde tiene la lavandería y nos hemos ido a tomar un té mientras le esperamos. A las 11h nos hemos acercado y ya estaba abierto, nos ha dado un abrazo a mí y a Mertxe le ha dicho hola. Parece que el saludar a las mujeres es muy distinto a nuestras costumbres. Nos ha hecho mil preguntas sobre Armenia y sobre porqué no nos dejaron entrar a Azerbaiyán. Hemos estado un buen rato hablando de todo un poco y ha comenzado a llegar gente así que le hemos puesto las lavadoras y él se encarga de poner las secadoras. 


Nos ha dicho que nos iríamos a dar un paseo y que después de comer volviésemos a por la ropa. Así hemos hecho nos hemos ido andando hasta el mercado.



Es gigante pero muy “georgiano” todo un poco revuelto y las cosas mezcladas. La fruta y verdura de repente se convierte en un puesto de zapatillas y otro de ropa después de un puesto de encurtidos. Lo que sí está todo junto es la carne por un lado y el pescado por otro y cada uno tiene su parte de sitio.


Las especias también están aparte y tienen una zona cerrada alejadas de todos los demás puestos como si serían un poco los “apestados”.  En las calles adyacentes infinidad de puestos tipo Istambul con todas las aceras ocupadas y vendiendo de todo.

Eran casi las 15h y en vez de arriesgarnos a comer “otro kachapuri” nos hemos ido a buscar el restaurante donde comimos uno de los días que estuvimos aquí a finales de abril. Sabíamos que estaba cerca de la Plaza de Batumi ya que estaba cerca. Lo hemos encontrado y ya eran casi las 16h así que “hacía” hambre.

Nos hemos sentado y hemos pedido un plato de berenjenas con queso y nueces y luego cada uno un plato. Mertxe ha pedido carne con champiñones y yo un pote de pasta rellena de carne.



 Menos mal que hemos podido cambiar ya que le estamos cogiendo un poco “manía” a la comida georgiana por repetitiva. De postre yo no quería nada porque ya estaba lleno y Mertxe ha pedido unos “panqueques” que según ella estaban buenos y a mí me parecía que estaban pasados.  Hemos tomado un té y hemos ido a buscar el autobús para ir a recoger la ropa.

Hemos llegado y ya nos la había doblado toda y metido en bolsas de plástico. Hemos estado hablando un rato sobre todo de su hijo que es dos veces seguidas campeón del Mundo De Jiu-Jitsu. De “casta” le viene al galgo porque Anvar ha sido campeón de Kazajistán de Judo. Nos hemos despedido de él y nos ha dicho que si venimos el año que viene para ir a los “Tan” que le avisemos y mientras que nos seguiremos hablando por wasap e Instagram.

Hemos subido al autobús de vuelta a la Jomer1 para dejar la ropa y descansar un rato y luego iremos a dar un paseo en plan tranquilo.

Al final hemos dado un paseo más largo de lo previsto y hemos podido ver como muchos pescadores desde el mismo puerto pescan una especie muy parecida a la anchoa, pero cada vez sacan 4-5-6-7 piezas depende la cantidad de anzuelos que pongan. 



Son parecidos a las moscas que utilizamos allí para la trucha así que mañana igual me animo e intento coger alguna.

Bueno ya estamos en casita rodeados de rascacielos y barcos un sitio precioso mucho más bonito que Euphoria donde dormimos la otra vez.

Agur eta ondo lo.

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